CHINA, DÍA 4: DE KANGDING A LITANG

Como decíamos, el despertador suena pronto, a las 05:30. Tras los avatares de buscar cosas en la oscuridad o con la puerta entreabierta, hoy dormían otros dos en la misma habitación, nos colgamos las mochilas con intención de buscar dos taxis que nos lleven a la estación. Sorprendidos por la prontitud de encontrar los susodichos, llegamos de noche a un lugar que no recordaba nada donde nos habían dejado el día anterior.

ESPERANDO EL AUTOBÚS EN LA ESTACIÓN DE KANGDING

BEATRIZ Y JORGE EN EL AUTOBÚS DE KANGDING A LITANG

La espera no se hace muy larga, el autobús salía a las 06:45, y en esos tres cuartos de hora aprovechamos para desayunar. La estación de autobuses no tiene desperdicio, Una lampara de mediados del XIX, y no de bonita precisamente. Los asientos son patrimonio histórico mas menos 105 años, la limpieza……….. sin ningún tipo de comentario. Un puesto de comida que daba un hambre….. en definitiva un documental de la 2, experimentado en carne propia.

BERTA Y L. JORGE EN EL AUTOBÚS DE KANGDING A LITANG

La primera sorpresa la furgoneta, no digo autobús, FURGONETA 18 plazas y viajamos 20, pensar que íbamos a pasar las siguientes 8 horas ahí metidos, se hacia un tanto incomodo. Tras algún contratiempo en cuanto a la ubicación y sobre todo que no tenemos maletero para dejar las mochilas y hay que subirlas con nosotros….comienza el viaje.

NEVANDO EN UNO DE LOS PUERTOS QUE ATRAVESAMOS ENTRE KANGDING Y LITANG

La carretera no deja de sorprendernos, desde que comenzamos el viaje. Muchísimas curvas, mal asfalto, en realidad hay tramos que son camino, y baches, baches y más baches.

NEVANDO EN UNO DE LOS PUERTOS QUE ATRAVESAMOS ENTRE KANGDING Y LITANG

Todo esto acompañado de un paisaje increíble y de unas sensaciones indescriptibles. El primer puerto que hemos subido lo hemos hecho nevando. El paisaje y el verde nos va cautivando, quizá también por evitar mirar a la carretera y ver como se adelantaba o entraba el conductor en las curvas. Los valles que vamos visitando nos sorprenden por la pendiente que tienen, agua por todos los sitios, ver a la gente desde la furgoneta como si fuera un mirador privilegiado desde donde observar un instante de sus vidas.

CASA TIBETANA ENTRE KANGDING Y LITANG

Creo que las sensaciones como en anteriores ocasiones cada uno vivió la suya, pero la verdad es que son muchas y en cada momento diferentes, buenas y malas, decepción, y emoción, y otras tantas.

A medida que los kilómetros pasan, el tipo de edificación y el verde cambia. También las clases de contorsionismo para dormir y la estrategia para poder encontrar esa postura con la cual al bajar sigan funcionando las rodillas y los riñones.

AUTOBÚS KANGDING LITANG REPOSTANDO

La primera parada técnica, repostar. Teníais que ver las caras de los que íbamos bajando. Precio gasóleo 47 cts de euro. A Jorge Pal. le mandan apagar el cigarro supongo por peligrosidad y ellos repostando con el motor en marcha, que cosas!.

CASAS TIBETANAS ENTRE KANGDING Y LITANG

Las casas a partir de aquí van tomando el aspecto que teníamos en mente, tipo tibetano, pero lo que sorprende es el detalle de las fachadas y ventanas. Nos llama la atención a todos.

MONTAÑAS NEVADAS CERCA DE KANGDING

La primera anécdota fue pasar un puerto a 4412 metros. Por carretera no habíamos pasado algunos a esa altitud.

Primera parada, una estación de lo más peculiar. En realidad, lo peculiar no era el espacio físico, sino todos los que estaban en ella. El conductor y alguno de los que nos acompañaban, han decidido comer, el resto ni nos lo planteamos.

HOMBRE PAGANDO PARA USAR EL WC EN LA ESTACIÓN DE AUTOBUSES DE YAJIANG

Bea y Berta deciden visitar unos baños por los que hay que pagar, 1 yuan. Por lo que contaron después una experiencia inolvidable.

NIÑO CON GORRA MILITAR EN LA ESTACIÓN DE AUTOBUSES DE YAJIANG

De nuevo el claxon suena, y entre músculos y tendones se van animando para volver a subir y sufrir de nuevo el confinamiento que venimos padeciendo. Otra vez en marcha, lo único que anima es lo que nos rodea como decía antes, unos paisajes que transmiten muchas cosas.

PAISAJE CERCA DE LITANG

Otro puerto esta vez a 4718 metros, y el paisaje se va transformando en zona verde sin muchos árboles pero con valles increíbles.

YAKS Y TIENDAS DE PASTORES TIBETANOS CERCA DE KANGDING

Que paisaje!!!

LITANG

LITANG

Tras 8 horas y media llegamos a Litang, a lo que suponemos es una estación de autobuses. Lo primero, como en ocasiones anteriores es ofrecernos alojamiento nada más bajar. Hacemos caso al primero, le acompañamos a lo que parece un Hotel, Potala se llama, pero decidimos mirar en otros sitios por si un aquel. Finalmente dormiremos en uno que las habitaciones tienen buen aspecto y el baño es bastante decente. Esta vez dormimos de dos en dos, habitaciones y CAMAS SEPARADAS.

LAVANDO VERDURAS EN LA CALLE EN LITANG

Después que los riñones, músculos y parte de algún que otro hueso fueran recuperando la ubicación original, el estomago empieza a decir que hace tiempo que lo tenemos olvidado. De nuevo tibetano, esta vez peor que ayer, recomendable solo la sopa tibetana de carne de yak. El arroz de dos tipos ahí se quedo. Con mantequilla y una especie de cacahuetes. Gracias a la pastelería que teníamos al lado pudimos completar la comida.

BERTA, BEATRIZ Y ARANCHA EN UNA CALLE DE LITANG

A pesar del cansancio, nos animamos a dar un paseo por el pueblo, que por cierto esta situado a 4016 mts. de altitud. El callejear se hace cómodo, todo llama la atención, al igual que nosotros a la gente de aquí. Las casas como decíamos antes de piedra, grandes, y la mayoría muy cuidado el aspecto exterior: ventanas de colores, puertas muy labradas, canes de colores también, vamos unas casas preciosas!.

SANTI, BERTA, BEATRIZ, JORGE Y ARANCHA VIENDO UN REBAÑO DE YAKS PASANDO POR UNA CALLE DE LITANG

Capitulo aparte, son los habitantes, sorprenden sus vestiduras, peinados, tocados, bueno todo!; sin olvidar la cantidad de mugre que llevan encima. Un señor nos contó que no se duchaba desde el 45….jejejeje es broma, pero por ahí por ahí.

BEATRIZ Y BERTA CON UNOS NIÑOS EN UNA BODA EN LITANG

BUENO, BUENO, BUENO estuvimos en el banquete de una boda tibetana, vimos un edificio llamativo, la puerta abierta y un montón de gente fuera. Para no variar, miramos dentro (El día que pongan un cepo…) y un montón más de gente sentada en bancos apoyados en las cuatro paredes comiendo, en el centro gente repartiendo comida. En un momento dado nos dijeron que subiéramos a un piso superior.

INVITADOS DE UNA BODA EN LITANG

Después de algunas negativas nos convencen, y…… más gente sentada en mesas corridas comiendo y bebiendo, esta vez el lugar de reparto de comida estaba en una esquina. Nos ofrecieron, pero ya habíamos comido y se antojaba difícil.

NOVIOS DE UNA BODA EN LITANG

De aquí a la habitación de los novios, apartado de los demás. Una habitación más pequeña;

Ah! un detalle, todo lo que no cabía en la boca, o que sobraba del plato adivináis donde terminaba?… pues no!, en el suelo, impresionante documento. Aunque pueda parecer mentira, sentíamos un pelín de vergüenza, entre los trajes, alhajas, olores, novios, cuñados y el colega del novio que iba ya sin gotita de sed…, os recuerda a algo?.

L. JORGE ENTREGANDO UN PAÑUELO A LOS NOVIOS EN UNA BODA EN LITANG

Bueno, pues al final entramos y pensando como dar una muestra de agradecimiento por nuestra parte se nos ocurrió corresponderles con un pañuelo de las fiestas de San Pedro que llevábamos. Se lo dimos como detalle para su colección de regalos. Muy agradecidos nos invitan a sentarnos con ellos a tomar un licor y brindar por el futuro de la pareja, esto último cosecha nuestra.

BERTA CON UNA NIÑA EN UNA BODA EN LITANG

Hacen una entradilla cantando y después nos piden que cantemos algo, tras hacer un poquito el ridículo y unirnos a la fiesta, a base de cantar, termina una de ellas dedicándonos una canción de bienvenida. Muy agradecidos y con 4.897.876 de fotos nos retiramos.

NIÑOS EN CLASE EN UN COLEGIO DE LITANG

Siguiente visita, un colegio, son las siete de la tarde y los niños siguen en clase, dos de nosotros tenemos una teoría pero eso lo dejamos para España. Visitamos las clases y para nuestra sorpresa nos dejan entrar en las tres que vimos abiertas. Agradecidos de igual manera nos despedimos. Los niños un encanto, creo, no preguntamos a sus padres.

UNA CALLE DE LITANG

El cuerpo, como si batería de móvil se tratara, empezaba a pitar dando a entender que debíamos regresar al hotel lo antes posible. Oído y hecho. A descansar, la altitud se nota.

OPERARIOS DE IBERDROLA EN LITANG

TAMBIÉN NOS DIO TIEMPO A LEER ALGUNO DE LOS MENSAJES QUE NOS ENVIÁIS, NOS HACE MUCHÍSIMA ILUSIÓN LEERLOS. SILVIA Y FRAN TENEMOS UN TIEMPO COJONUDO, SOLO HEMOS TENIDO UN DÍA MALO. A TODOS LOS QUE NOS AMENIZÁIS EL VIAJE Y NOS MANDÁIS RECUERDITOS…… SOIS GENIALES. DESPUÉS DE TODA LA CHAPA UN MOMENTITO DE PUBLICIDAD, ENCENDED LOS ALTAVOCES…………

COMO SE PONE UNA LAVADORA EN CHINA

MAÑANA MÁS.