El día de hoy lo hemos dividido en dos zonas concretas: área de Higashiyama Norte y Sur. Ambas ofrecen la oportunidad de visitar los templos de la zona oriental de Kyoto. El plan que llevamos contempla llegar primero a la zona más al norte e ir bajando hacia el sur, siguiendo las rutas que te entregan en cualquier oficina de turismo, si nos diera tiempo.
Empezamos por Higashiyama norte y nos subimos al autobús 100, son 220 yenes, que nos lleva hasta la zona de Ginkakuji-mae. En el autobús escuchamos hablar un idioma que entendemos a la perfección y comenzamos a charlar con una pareja de Jerez, Maripaz y Borja. Visto que tenemos el mismo plan de ruta decidimos hacerlo juntos.
Los templos que hemos visitado en primer lugar son los que recorren la que llaman la ruta del filósofo, denominada así porque un profesor de filosofía de la Universidad de Kioto, Nishida Kitaro, lo recorría para mantenerse en forma.
HIGASHIYAMA NORTE
Los templos visitados son:
GINKAKUJI
- La entrada cuesta 500 Y. Es el denominado Templo Plateado. Los jardines nos han encantado. Está declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO.
HONNEN-IN
- La entrada es gratuita. La guía lo significa porque es de la secta Jodo y la puerta está techada de paja. Sin más.
REIKANJI
- Nos los hemos encontrado cerrado.
EIKAN-DO
- La entrada son 600 yenes. El paseo es muy agradable y te permite subir a una pagoda que tiene un balcón-mirador sobre Kyoto.
NANZENJI
- La entrada son 500 yenes. Está bien, se pueden contemplar el interior de las habitaciones y resulta interesante. Merece la pena la visita y el paseo que puedes realizar por su interior. El jardín anexo se puede visitar, pero la entrada es aparte y son 500 yenes, no hemos entrado.
HIGASHIYAMA SUR
Terminada esta zona comenzamos el área de Higashiyama sur donde hemos visitado:
HEIAN JINGU
- Este templo permite el acceso al primero de sus patios y la parte del central del conjunto. Después existe un jardín, 600 yenes, que puedes visitar y que nosotros no hemos visto.
PARQUE MARUYAMA
- Aunque hay bastantes templos más en este recorrido no los hemos visitado por dentro. Hemos llegado al Parque Maruyama donde hemos aprovechado para comer. El parque merece un paseo. En el caso de la comida queremos apuntar que, gracias a Maripaz y Borja, hemos probado el “palo pera” (comestible compuesto por una salchicha insertada en un pincho, tipo moruno, y rebozada de cantidad enorme de una masa dulce que le da el aspecto que lo bautiza) y otro que no recordamos el nombre (tipo pastel rebozado y aplastado, relleno de algo con curry).
TEMPLO KIYOMIZUDERA
Recorremos las calles de la zona comercial del Kyoto antiguo con dirección al templo de Kiyomizudera: 300 yenes. Es en el que más gente había y más sensación de multitud turística nos ha trasladado. Merece la pena. Es Patrimonio de la Humanidad.
Hemos paseado por la zona de Gion, donde visitamos los jardines de los templos Ryosuku y Kenninji (no hemos podido entrar).
Después de despedirnos de Maripaz y Borja, ha sido un lujo compartir este día con ellos, seguimos paseando por las calles Hanami-koji y Shinbashi. La arquitectura se da un aire más parecido a lo que pudo ser la tradicional aquí en Kyoto: casas bajas de madera y con mucho encanto. Aunque no deja de ser una zona comercial.
Esta zona es famosa por las posibilidades de encontrarte con una geisha. El caso de las geishas es un poco como el de la meigas gallegas, “haberlas hailas”. Es muy curioso ya que todos los turistas venimos aquí con la esperanza de ver a una. Pensemos que es el fenómeno ovni, sabes que hay un sitio donde la gente ha visto muchos y tú no quieres ser menos, apareces con tu cámara “en ristre” esperando poder contar que has fotografiado a uno, pero justo ese día… no vienen, es la ley de Murphy. En el callejero que nos dieron en la estación, te indican y destacan esta zona y la calle Pontocho, tal y como indican un templo, jardín o edificio a visitar.
Visitamos la calle Pontocho (la que más nos ha gustado en el día de hoy), Kiyamachi y finalmente esa zona comercial que linda con Kawaramachi. Desde aquí vuelta al hostel.
Tras otra agradabilísima tertulia con Esther, Jordi, Antonio e Ibon nos despedimos de los primeros porque, de momento, creemos no volveremos a coincidir en este viaje.
Besos y abrazos según corresponda.
Hola viajeros!…
Estoy altamente interesada en la secta «Jodo»… me podríais traer una hoja de inscripción para apuntarme, por favor. 😛
Besines
Hola….. No está bien que se comente que puede haberlas y ni en foto, que poca consideración tienen estos “Y” seguro que no estaban escondidas detrás de los paraguas jajaja.
Preciosas fotos, en otro momento más comentarios que se me acaba el tiempo….
Besos YETHY Y SRA.