Nos levantamos a las 5:00 horas de la madrugada, a las 5:30 horas bajamos a desayunar, cogimos las mochilas ya que a las 6:00 horas habíamos quedado en la Plaza de Armas. Vemos, como los primeros rayos de luz acarician la cumbre nevada de los volcanes Sabancaya (5.976m.)y Huacay Huacay (6.025m.).
Nos montamos en el autobús con legañas aun en los ojos para ir a la Cruz del Cóndor, pero antes hicimos varias paradas para sacar fotos, en una de ellas fue para ver unas tumbas colgantes construidas con anterioridad a los incas, que estaban en una ladera de muy difícil acceso, todas fueron profanadas.
El Valle del Colca es un valle interandino poblado y desarrollado por dos etnias antes de llegar los incas, los Collaguas que ocupaban la zona oriental de la cuenca del río y los Cabanas que estaban en la zona occidental del Río Colca. El valle tiene 100 kilómetros de longitud con una profundidad de 4.160 metros de altura.
La carretera va siguiendo los acantilados del valle, en un continuo curva y contra curva. Aquí el paisaje es extraordinario, por el río, los diferentes colores del campo, las montañas, los volcanes y los bancales prehispánicos, incas y de épocas anteriores.
MIRADOR PINCHOLLO
Mario Vargas Llosa lo llamó «El Valle de las maravillas». Paramos en el mirador de Pinchollo y nos enseñan una roca tallada que se supone representa un mapa de los bancales.
Hicimos una breve parada en Maca, donde había un paisano con un águila real para que la gente se hiciese fotos con ella. Óscar se la puso encima y le hice unas fotos. Las calles aquí son empedradas o de tierra y las casas humildes y rústicas, lo que nos hace pensar lo duro que tiene que ser vivir en esta zona.
Me tuve que tomar una pastilla de sorochil para el dolor de cabeza producido por la altitud. El sorochil son unas pastillas que se pueden comprar en cualquier farmacia, son un poco caras pero muy efectivas contra los síntomas de la altitud. Óscar compro un tirachinas por 2 soles.
Otra vez al autobús y la próxima parada la hacemos cerca de la Cruz del Cóndor y el guía nos da la opción de ir andando desde allí por los acantilados o ir en bus. Todos nos bajamos y vamos andando.
Al poco vemos 3 o 4 cóndores por la parte de abajo del cañón y alguna que otra ave rapaz. Estamos a casi 4.000 metros de altitud y eso se nota al andar.
CRUZ DEL CÓNDOR
Al final llegamos a la Cruz del Cóndor, sitio que está situado en un cortado de 1.200 metros de altitud y al otro lado 3.200 metros de caída vertical hasta el río. El sitio es espectacular, eso si, todo lleno de turistas y vendedoras de artesanía por todas partes.
Todo el tramo de carretera desde Chivay hasta aquí, en todos los sitios donde suelen parar los autobuses hay vendedoras, empieza a ser una pesadilla.
De repente aparece un Cóndor sobrevolando cerca nuestro, todo el mundo cámara en mano disparando cientos de fotos. La verdad es que te quedas con la boca abierta ver un bicho con una envergadura de 3 metros volando por encima tuyo.
Los jóvenes son marrones y los adultos negros con la cabeza blanca. Es reconocido como el ave voladora más grande y pesada del planeta. Y el que mayor superficie alar presenta.
Los adultos llegan a medir hasta 142 cm de altura, y entre 270 y 330 cm de envergadura, y pesan de 11 a 15 kg los machos y de 8 a 11 kg las hembras.
Es una de las aves que vuela a mayores alturas, utilizando las corrientes térmicas ascendentes verticales de aire cálido para poder trepar con relativa facilidad los 7000 metros; luego puede volar por cientos de kilómetros planeando el territorio casi sin mover las alas extendidas.
Son carroñeros, se alimentan generalmente de animales muertos. No los comen inmediatamente pues una vez localizada la carroña, los cóndores no descienden a comer de manera inmediata sino que se limitan a volar sobre la misma. Pueden pasar hasta dos días hasta que se acerquen a su presa para empezar a alimentarse. Primero de las partes más blandas.
En total vimos 13 cóndores y la verdad mereció mucho la pena venir hasta aquí por verlos. Nos hicimos fotos entre nosotros antes de volver al autobús.
De vuelta a Chivay el autobús hizo diversas paradas para hacer alguna que otra foto y también paramos en el pueblo de Yanque para ver el bonito pórtico de su iglesia.
CHIVAY
En Chivay paramos a comer, pero nosotros no fuimos al restaurante recomendado por el guía.
Compramos unos panes en una panadería y nos fuimos a la plaza de armas, nos hicimos unos bocatas de jamón y salchichón, uhmm que bueno el embutido de la tierra.
PATAPAMPA (MIRADOR DE LOS ANDES)
Después fuimos a buscar al resto del grupo y una vez en el autobús nos pusimos en camino rumbo a Arequipa. Paramos en Patapampa, también conocido como Mirador de los Andes. Es el punto más alto a 4.951 metros para hacer unas fotos, había algo de nieve y por todas partes está todo lleno de ampachetas, lo que en montaña se conoce como hitos (pequeños montones de piedras para señalizar caminos), y que aquí la gente a ido poniendo como ofrenda a los dioses, hay miles de ellos. Las vistas desde aquí son impresionantes.
Se ven los volcanes nevados de Sabancaya 5.976 metros, el Hualca Hualca 6.025 metros y el Ampato 6.288 metros, este último fue donde encontraron la momia de Juanita.
El camino hasta Arequipa la hicimos por la misma carretera que al venir, fui hablando con las uruguayas Marializ y Silvana. También con Emma, una británica con la que practique algo de ingles y ella algo de español. Y también con un londinense que se llamaba Mathew. Óscar por su parte se hizo amigo de un peruano de Trujillo. Nos intercambiamos algunas direcciones de email.
Le dije al guía si había posibilidad de dejarnos en la terminal de autobuses en vez de en el hostel y nos dijo que no había ninguna pega. Así que al llegar a Arequipa y después de dejar a todo el mundo en sus respectivos hoteles nos bajamos en la terminal para comprar los billetes a Puno. En la estación nos dividimos y fuimos preguntando precios y horarios en las distintas compañías y al final optamos por cogerlos con Julsa por 15 soles cada billete.
Nos cogimos un taxi hasta el hostel, y le preguntamos a James, que es el dueño de este, si podíamos ducharnos, que si había que pagar algo lo pagábamos. Nos dijo que podíamos ducharnos sin problemas, así que cogimos las mochilas y subimos arriba que es donde estaban las duchas. Yo mientras se iban duchando el resto, me fui a un ciber a ver si hablaba con Doris, y si, estuve hablando con su hermana Betty. La comente la idea que teníamos, que salíamos a las 22:30 horas hacia Puno y que llegábamos allí sobre las 5:00 horas de la madrugada.
Rápidamente me puso en contacto vía messenger con un tal Raúl de una agencia de Puno. Quede con él en que nos iría a buscar a la llegada del autobús. Nos ofrecía el tour que queríamos hacer a unas islas del lago Titicaca por 12 dólares. Además nos conseguía los billetes de autobús de Puno a Cuzco por 30 soles para unas horas después de llegar de las islas. Así que una vez tuve todo cerrado y arreglado a un precio de amigo gracias a nuestras amigas limeñas volví al hostel para contárselo al resto.
Después de contar las buenas noticias me dijeron que no quedaba agua caliente. Así que una ducha ligera y al día siguiente ya habría una más a fondo.
Preparamos las mochilas y pagamos todo lo que debíamos en el hostel. Una noche, el tour por el Valle del Colca y la lavandería por 474 soles. La noche 27 soles y el tour 25 dólares. Cogimos un taxi que nos llevase al centro por 2 soles para cenar. Le dijimos al taxista que nos nos dejase en la Plaza de Armas. Un poco antes de llegar le pregunte si sabia algún sitio donde se cenara bien y barato y nos dejo en la puerta del Chicken Palace, muy cerca de la plaza. Pedimos medio pollo a la brasa y 2 bistecs a la parrilla con patatas fritas y ensalada y cervezas para todos. Cenamos muy bien y pagamos 49 soles por todo.
Al terminar cogimos otro taxi que por 2,5 soles, nos llevo a la terminal de autobuses. Allí estuvimos esperando hasta que nos montamos en el bus. Una vez más nos grapan un resguardo en cada mochila y otro que nos dan a nosotros, pero antes tuvimos que pagar una tasa de 1,5 soles cada uno por un seguro de viaje. El autobús estaba bien, era de dos pisos con un baño. Nosotros viajamos en el piso de arriba atrás del todo. Lo malo fue que en el asiento del medio, que por cierto no era asiento sino un resalte, se monto un tío. Y Óscar y Yo casi no pegamos ojo pensando en las mochilas de mano y la cámara de fotos, que estaban al lado de él.
PUNO
Llegamos puntuales a Puno, recogimos las mochilas con bastante sueño y al salir a la terminal un hombre levanta un letrero con mi nombre, era Raúl. Les presento al resto y salimos a un taxi, mete todas las mochilas. Pretendía ir él en el maletero pero el taxista le dijo que ni de coña, que estaba prohibido hacer eso. Al final se va en otro taxi. El paga los dos taxis.
Llegamos al Hotel El Buho, estaba cerrado pero insiste llamando hasta que nos abren, entramos dentro y en una salita en la que había unos sillones y sofás dejamos las mochilas y nos dice que descansásemos allí un rato hasta las 7:00 horas que venia a recogernos. Eran las 5:20 horas, así que nos tumbamos un rato, nos dejan también unas mantas para taparnos. Largo día como veis.
Besos y abrazos según corresponda
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