El viaje desde Tokyo es más corto en tiempo de lo que lo fuera para llegar ayer a Nikko. En una hora llegamos a Kamakura. Como dice la guía es uno de los destinos turísticos más frecuentados de Japón, sobre todo la visita a su Daibutsu o buda gigante. Nos bajamos en la estación de Kita-Kamakura. Para poder recorrer dos templos que nos señalan como importantes: Engaku ji y Jochi-ji recorriendo desde éste último el camino forestal que une varios templos más hasta alcanzar la figura del gran Buda.
KAMAKURA
Kamakura es un pueblo costero y fue la capital de Japón entre 1185 y 1333. Como legado, esta localidad posee 19 santuarios sintoístas y 65 templos budistas, entre los que cuentan con los dos monasterios más antiguos de Japón. Muchos de estos edificios están comunicados entre sí por tres senderos.
ENGAKU-JI
En primer lugar visitamos Engaku ji, la entrada son 300 yenes. Visitamos todo su conjunto aunque no nos han permitido entrar en casi ningún edificio. Es más, hay uno en el que tienes que pagar a mayores otros 200 yenes, y no sabíamos porque. A éste no hemos entrado. El conjunto tampoco nos sorprende por sus jardines, así que, a pesar de ser uno de los más destacados, también es uno de los que menos nos ha impactado. Lo que si hemos visto en el Butsuden (edificio principal o santuario) alberga la estatua de un buda con corona, lo que la guía traduce como la imagen del Dios, eso nos ha llamado la atención por no haberlo visto antes.
RUTA DEL GRAN BUDA
Una vez concluida la visita seguimos hacia Jochi ji, en este templo no hemos entrado, pero nos ofrece la posibilidad de seguir el recorrido que aquí llaman del Gran Buda. Te permite atravesar una zona boscosa. Su longitud son 3,5 kilómetros y si la climatología te lo permite es un recorrido con mucho encanto, nosotros tuvimos suerte. Este sendero pasa junto a santuarios como: Zeni-arai Benten o Sasuke-no Inari, antes de llegar al gran Buda.
DAIBUTSU
Acceder para ver la figura del Daibutsu son 200 yenes y desde luego merece la pena, el conjunto es muy agradable, siempre y cuando consigas evadirte de los 435 compañeros turistas que como tú quieren hacer la foto, que se la hagan o simplemente sentarse a disfrutar del momento.
Te permiten acceder dentro de la figura por 20 yenes, es curioso.
PLAYA DE KAMAKURA
Nuestro siguiente punto de visita lo ponemos en la playa. El recorrido no es largo y es fácil alcanzarla. Es una arena oscura y en el día de hoy no hay bañistas, lo que si vemos es bastante gente intentando surfear. Las olas no están por la labor de levantarse mucho.
Una vez concluido el paseo por la playa volvemos hasta la estación de Kamakura para regresar a Tokyo. La excursión a esta localidad merece la pena.
TOKYO
Ponemos como destino en nuestro GPS el barrio Rinkai (en la misma línea de la JR que lleva a Disney Tokyo), para ver un conjunto de acuarios, llamado Tokyo Sea Life Prak, que nos ha encantado. La entrada son 700 yenes y merece mucho la pena. El recinto está junto al mar, te muestra en vivo peces y animales marinos que sólo has visto en la tele o en el cine: tiburones, peces martillo, peces tropicales y de todo tipo, cangrejos pequeños y enormes, langostas, pingüinos, frailecillos, medusas, etc. Pero lo que llama mucho la atención es el teatro que tienen con un acuario circular lleno de atunes y bonitos, todos enormes a modo de telón. Este espacio merece la pena sentarse a disfrutarlo. Tienen un graderío habilitado para poder contemplarlo.
Nuestro siguiente destino es Akihabara, una zona de calles llenas de vida con tiendas especializadas en productos electrónicos y cultura pop. Desde la Estación de Tokyo seguimos en nuestro último día de la JR Pass por línea que más hemos utilizado, la Yamanote. Desde esta estación nos lleva poco tiempo llegar a Akihabara. Este barrio nos ofrece la posibilidad de ver centros de juego, centros comerciales con todo tipo de electrónica, Pachinkos y sobre todo las Maider, chicas que vestidas de colegiales o sirvientas que hacen disfrutar por un tiempo a aquellas personas que desean estar acompañadas o recibir cariño. No es cariño sexual. Simplemente es un rato de cercanía y juegos para personas que por su trabajo o motivo que sea, desean estar un rato en compañía de estas chicas.
Pasamos un rato divertido y sorprendiéndonos por todo lo que rodea esta parte de la ciudad.
Antes de volver al Hotel decidimos visitar de nuevo Shibuya. Es un paseo nocturno y pensábamos que tendría que ser muy llamativo visitar una zona tan comercial, repleta de carteles luminosos. Para nosotros ha sido un acierto porque del día a la noche hay un cambio muy importante. Es martes y las calles están repletas de gente que camina, que compra, que está cenando, … es increíble la actividad de esta ciudad a cualquier hora del día. A la vez es increible también, la cantidad de comercio que tienen vayas donde vayas. Seguimos el recorrido que hicimos el primer día con la guía del país Aguilar por la parte de la estación, recorriendo las calles Bunkamura-do, Dogen-zaka y los alrededores. La plaza donde se encuentra la estatua de Hackiko es como un Times Square en oriental, merece mucho la pena una visita nocturna.
Besos y abrazos según corresponda.
Deja tu comentario